¿Buscas una leche vegetal cremosa, nutritiva y libre de aditivos?
La leche de hemp (o leche de cáñamo) es una joya de la alimentación consciente: rica en proteína vegetal completa, omega-3, calcio, magnesio y hierro.
Además, es 100% natural, sostenible y apta para todo tipo de dietas.
Lo mejor de todo es que se prepara en menos de 5 minutos, no necesita colarse y tiene un sabor suave y ligeramente a nuez que combina con todo.
Características destacadas
Vegana
Sin lactosa
Sin gluten
Sin soya
Natural y sin aditivos
Ingredientes (para 1 litro aprox.)
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½ taza de semillas de hemp peladas (hemp hearts)
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3 a 4 tazas de agua filtrada (usa menos para una textura cremosa o más para una leche ligera)
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1 o 2 dátiles sin hueso (opcional, para endulzar de forma natural)
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½ cucharadita de extracto de vainilla natural (opcional, aporta aroma y sabor suave)
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1 pizca de sal marina sin refinar (opcional, realza el sabor y ayuda a conservarla mejor)
Preparación paso a paso
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Coloca las semillas de hemp y el agua filtrada en la licuadora.
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Agrega los dátiles, la vainilla y la pizca de sal si los utilizas.
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Licúa a velocidad alta durante 30 a 60 segundos, hasta obtener una textura cremosa y homogénea.
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¡Listo! No necesitas colarla: las semillas de hemp se desintegran completamente y dejan una leche suave y sedosa.
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Guarda tu leche vegetal en un frasco o botella de vidrio con tapa hermética.
Conservación: dura hasta 4 días en refrigeración.
Tips para aprovecharla al máximo
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Agítala antes de usar: la separación natural es normal en leches vegetales caseras.
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Ideal para batidos, cafés, cereales, avena, postres o recetas saladas.
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Para un sabor diferente, prueba añadir una pizca de canela, cacao, cúrcuma o jengibre en polvo.
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Si la usas en bebidas calientes, caliéntala a fuego bajo y evita hervirla para conservar sus nutrientes.
¿Y si la cuelo?
Aunque no es necesario colarla, si prefieres una textura ultra ligera puedes hacerlo con una bolsa para leches vegetales o paño fino.
¡Pero no tires la pulpa! Está llena de fibra y nutrientes.
Aprovecha la pulpa en:
Galletas o barritas energéticas caseras
Pancakes o muffins saludables
Batidos o bowls para darles textura y un extra de proteína
Beneficios de la leche de hemp
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Rica en proteína vegetal completa
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Fuente natural de omega-3 y omega-6
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Aporta calcio, hierro, fósforo y magnesio
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Favorece la salud digestiva y cardiovascular
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Sin colesterol, sin lactosa y sin aditivos
Además, al ser un cultivo sostenible que no requiere pesticidas, la semilla de hemp es una alternativa ecológica frente a otras leches vegetales.
Conclusión
La leche de hemp casera es una opción deliciosa, ecológica y nutritiva que se adapta perfectamente a un estilo de vida saludable y consciente.
Es fácil de preparar, versátil y tan cremosa que te costará creer que está hecha con solo dos ingredientes naturales.
Disfruta cada sorbo sabiendo que nutres tu cuerpo y respetas al planeta.

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